En un reciente evento cultural en Jalisco, los tradicionales “cantaritos” han cobrado protagonismo no solo por su sabor distintivo, sino también por la dinámica que generan entre los asistentes. Los cantaritos, una bebida típica de la región que combina tequila, jugo de cítricos y refresco, se han consolidado como un símbolo de la identidad jalisciense en diversas festividades.
El fenómeno social de los cantaritos
Durante las fiestas pasadas, se registró un aumento notable en el consumo de esta bebida. Según cifras proporcionadas por los organizadores del evento:
- Se vendieron más de 5,000 cantaritos durante el fin de semana.
- El 40% de los visitantes indicó que uno de los motivos principales de su asistencia fue disfrutar de esta bebida.
- El 70% de las ventas de bebidas correspondió exclusivamente a los cantaritos.
Ricardo Gómez, uno de los organizadores, comentó sobre el fenómeno:
“Los cantaritos no solo representan una bebida, sino una experiencia y una conexión con nuestras raíces. Ver a la gente disfrutarlos juntos es lo que realmente importa.”
Este revuelo no solo se ha limitado a las festividades en Jalisco, sino que se observa un interés creciente por los cantaritos en otras regiones del país, lo que promete convertirlos en una tendencia nacional. Así, los cantaritos se consolidan como más que una bebida, son un auténtico festín de sabores y convivencia.