En un movimiento que ha generado controversia, el Senado de México ratificó a Rosario Piedra Ibarra como titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para un nuevo periodo. Esta decisión ha sido recibida con críticas por parte de más de 100 organizaciones y colectivos, quienes consideran que la reelección de Piedra Ibarra es una oportunidad perdida para fortalecer la defensa de los derechos humanos en el país.
Reacciones de la Sociedad Civil
Las organizaciones firmantes del comunicado han expresado su profunda preocupación afirmando que el Senado no ha escuchado las demandas de justicia y cambio en la CNDH. Estas entidades han cuestionado la independencia y efectividad durante el primer mandato de Piedra Ibarra y su capacidad para enfrentar los desafíos actuales.
En una declaración, las organizaciones señalaron que:
“La reelección de Rosario Piedra confirma la falta de sensibilidad del Senado a las víctimas que demandan un cambio en la defensa de los derechos humanos.”
Los críticos han argumentado que durante su gestión, la CNDH no ha cumplido con su papel de proteger adecuadamente los derechos de las víctimas.
Algunos de los puntos principales que destacan son:
- Falta de independencia en sus decisiones.
- Insuficiente capacidad de respuesta ante violaciones a derechos.
- Desconfianza de las víctimas en los procesos institucionales.
A pesar de las críticas, el Senado respaldó la reelección de Piedra Ibarra, subrayando su compromiso de continuar con los esfuerzos en pro de los derechos humanos en México. Sin embargo, las organizaciones exigen una rendición de cuentas real y efectiva de los resultados alcanzados en su gestión.