Perros salvajes han comenzado a representar una seria amenaza en la Sierra de Zapalinamé, un área natural protegida en Coahuila, México. Estos perros, que originalmente fueron abandonados o se escaparon de sus hogares, ahora se mueven en manadas que ponen en peligro tanto a la fauna local como a las personas que visitan la sierra.
Impacto en la biodiversidad
Las manadas de perros salvajes están afectando de manera negativa a la biodiversidad de la región. Depredan sobre especies nativas, algunas de las cuales se encuentran en peligro de extinción. Los perros no solo cazan por necesidad, sino también por instinto, lo que ha llevado a una disminución en la población de varias especies animales. Entre los animales afectados se encuentran venados, zorros y aves.
Los expertos han identificado varios factores que han contribuido a este problema:
- Aumento de perros abandonados en la región.
- Falta de control y manejo adecuado de animales domésticos.
- Atracción de perros por basureros y restos de alimentos en el área.
Autoridades locales y ambientalistas están trabajando en conjunto para buscar soluciones que mitiguen esta problemática. Se están considerando medidas como campañas de esterilización y educación para la comunidad sobre la tenencia responsable de mascotas.
La importancia de la Sierra de Zapalinamé como fuente de agua y pulmón verde para la región hace urgente la implementación de estrategias efectivas para controlar la población de perros salvajes. Un portavoz de las autoridades comentó,
“La protección de esta área no solo beneficia a la fauna, sino también a los habitantes de las ciudades cercanas que dependen de sus recursos naturales.”
Con esfuerzos coordinados, se espera poder restaurar el equilibrio ecológico y proteger este importante ecosistema de la Sierra de Zapalinamé.