En Culiacán, una pregunta persiste: ¿Quién ejerce el verdadero control, el Estado o el crimen organizado? Esta interrogante cobró nueva relevancia tras los recientes acontecimientos violentos en la región.

El Estado vs. el Crimen Organizado

El impacto de los cárteles en Culiacán no es un fenómeno nuevo, pero la magnitud y frecuencia de los enfrentamientos han aumentado significativamente. En muchos casos, las fuerzas del orden parecen superadas por el poder y la logística de los grupos criminales.

La violencia relacionada con el narcotráfico ha creado un ambiente de inseguridad constante que afecta la vida diaria de los habitantes. A pesar de los esfuerzos del gobierno por restaurar la paz, los resultados han sido limitados.

Estadísticas recientes indican un preocupante incremento en los delitos en Culiacán:

• Homicidios: un aumento del 25% en comparación con el año anterior.
• Secuestros: se han reportado al menos 10 casos mensuales.
• Extorsiones: las denuncias han aumentado en un 40%.

Un residente, que prefirió mantener el anonimato, expresó su frustración con la situación actual:

“Es difícil vivir con miedo diario. No sabemos si nuestras autoridades realmente pueden protegernos”.

A pesar de estos desafíos, el gobierno federal ha reiterado su compromiso de combatir al crimen organizado y reforzar la seguridad en la región. Sin embargo, la percepción pública sigue siendo escéptica, y muchos ciudadanos continúan sintiéndose atrapados entre el poder del Estado y el dominio del crimen.