El sector turístico en México enfrenta un acalorado debate tras la propuesta de imponer un nuevo impuesto de 42 dólares a cada pasajero que llegue a México a bordo de cruceros. Esta medida ha generado controversias entre empresarios del sector turístico y las autoridades locales.
Reacciones de la industria
Los empresarios han expresado su preocupación, argumentando que este impuesto podría disuadir a los cruceristas de visitar México, afectando considerablemente a las economías locales que dependen del turismo. Un representante del sector comentó:
“Esta medida podría provocar una disminución significativa en el número de visitantes, lo que impactaría directamente en los ingresos de muchos negocios pequeños.”
Por otro lado, las autoridades defienden la propuesta, señalando que los fondos recaudados se utilizarían para mejorar la infraestructura turística y los servicios, haciéndolos más atractivos para los futuros visitantes.
Algunos datos relevantes que se han planteado en la discusión incluyen los siguientes:
- Se espera recaudar millones de dólares anualmente con este impuesto.
- Más de un millón de pasajeros de cruceros visitan México cada año.
- Ciertos puertos dependen en más del 70% de los ingresos del turismo de cruceros.
La controversia continúa mientras ambos lados analizan el impacto que este impuesto podría tener en el futuro del turismo de cruceros en México.
