El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha renovado sus promesas de campaña con declaraciones polémicas que han capturado la atención internacional. En un reciente evento, Trump afirmó que, de regresar a la Casa Blanca, buscaría eliminar la ciudadanía por derecho de nacimiento en el país. Esta medida impactaría principalmente a hijos de inmigrantes nacidos en Estados Unidos, una política que ha sido considerada parte del tejido constitucional del país.

Políticas de Trump en la mira internacional

Además de las reformas migratorias, Trump también mencionó su intención de retirar a Estados Unidos de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), si considerara que los miembros de la alianza no aportan lo suficiente económicamente. Estas declaraciones han generado preocupación tanto a nivel nacional como internacional, dado el papel clave de Estados Unidos en organizaciones globales.

En su discurso, Trump declaró:

“Estamos en un nivel crítico donde los aliados deben compartir la carga. No podemos seguir siendo los únicos financiando la seguridad global.”

Sus palabras subrayan su enfoque de política exterior, que prioriza los intereses nacionales por encima de compromisos multilaterales.

• Eliminar la ciudadanía por nacimiento afectaría a millones de personas en Estados Unidos.
• La salida de la OTAN podría desestabilizar la unidad de la alianza transatlántica.

Analistas políticos advierten que las propuestas de Trump podrían enfrentar fuertes desafíos legales y diplomáticos, especialmente en un contexto internacional ya tenso. Las repercusiones de tales medidas pueden extenderse más allá de las fronteras de Estados Unidos, alterando el equilibrio político y social en diversas regiones.