La economía de México se enfrenta a un panorama mixto ante las políticas comerciales de Estados Unidos, especialmente con las amenazas de aranceles del expresidente Donald Trump. Sin embargo, expertos económicos señalan que existen oportunidades de crecimiento para el país, aun en este contexto desafiante.

Oportunidades a la vista

A pesar de las tensiones comerciales, México ha logrado mantener un desempeño favorable gracias a su diversificación económica y alianzas estratégicas. Analistas destacan que el país podría beneficiarse al fortalecer su posición como socio comercial clave y atraer inversiones extranjeras.

Uno de los factores que juegan a favor de la economía mexicana es el renovado interés en trasladar parte de las cadenas de suministro más cerca de los Estados Unidos, un fenómeno conocido como nearshoring. México, debido a su proximidad geográfica y acuerdos comerciales vigentes, está bien posicionado para aprovechar esta tendencia.

“México tiene una ventaja competitiva gracias a sus tratados comerciales, su mano de obra calificada y costos más bajos comparados con otros países”, señalan los analistas.

Además, el sector manufacturero en México ha mostrado resiliencia y capacidad de adaptación, lo cual es crucial para enfrentar las incertidumbres globales y responder a nuevas demandas del mercado.

Algunos datos relevantes sobre la economía mexicana son:

• El crecimiento del PIB mexicano se proyecta en un 2.1% para este año.
• Las exportaciones a Estados Unidos representan un 80% del total de exportaciones del país.
• Más del 50% de las inversiones extranjeras directas provienen de Estados Unidos.

Ante este escenario, los expertos sugieren que México debe continuar enfocándose en innovaciones tecnológicas y en la mejora de su infraestructura para maximizar el potencial de crecimiento y desarrollo económico sostenible.