La investigación sobre la tragedia del sumergible Titan continúa avanzando en Canadá, con un enfoque en determinar las causas de su catastrófica implosión. Esta semana, la Junta de Seguridad del Transporte de Canadá (TSB, por sus siglas en inglés) ofreció una actualización sobre sus hallazgos preliminares, en medio de un intenso escrutinio público y mediático. El sumergible, que llevaba a cinco personas, desapareció en el Atlántico Norte en junio pasado mientras exploraba los restos del Titanic.

Hallazgos preliminares

Durante una conferencia de prensa en St. John’s, Terranova y Labrador, la TSB reveló varios detalles importantes sobre su investigación. Según los expertos, las primeras evidencias apuntan a una falla estructural del casco del sumergible como posible causa de la implosión.

“Nuestros investigadores están trabajando arduamente para recopilar y analizar toda la información posible para entender qué ocurrió y prevenir futuras tragedias,”

declaró Kathleen Fox, presidenta de la junta.

La agencia informó que todavía están en proceso de examinar escombros recuperados del fondo del océano, a una profundidad de más de 3,800 metros. Adicionalmente, varios equipos internacionales están colaborando en la investigación, incluyendo agencias de los Estados Unidos y Europa.

Algunos datos estadísticos clave proporcionados por la TSB incluyen:

• Profundidad del sitio del accidente: 3,800 metros.
• Esfuerzo de recuperación involucrando a más de 10 barcos y sumergibles robóticos.
• Duración de la operación de búsqueda: 15 días.

La presidenta de la TSB subrayó que se necesitarán meses, si no años, para completar la investigación debido a la complejidad y las condiciones extremas del entorno submarino.

Por otro lado, hay voces dentro de la comunidad de expertos en sumergibles que están cuestionando los estándares de seguridad y regulación de estos vehículos. Algunos argumentan que la tragedia del Titan podría haber sido evitada con una inspección y certificación más rigurosa.

“Este incidente pone de relieve la necesidad de actualizar y reforzar las regulaciones de seguridad para operaciones en aguas profundas,”

comentó James Cameron, director y explorador oceánico.

Mientras tanto, las familias de las víctimas continúan lidiando con la devastadora pérdida y esperan que la investigación arroje luz sobre lo que salió mal y cómo evitar futuros incidentes similares.