En la zona norte del país, la ciudad de Saltillo se divide en dos realidades distintas: una de constante desarrollo y progreso, y otra de rezago y dificultades. Esta dinámica dual genera una serie de retos que afectan a todos los niveles de la sociedad y, en especial, a los sectores más vulnerables.
Desigualdad en Saltillo
Los índices de crecimiento económicos y de inversión en infraestructura de ciertos sectores de Saltillo presentan cifras alentadoras, con proyectos millonarios que buscan modernizar la ciudad. Sin embargo, esto contrasta con áreas que, aunque estén geográficamente cerca, carecen de servicios básicos y oportunidades.
De acuerdo con datos recientes, se observan los siguientes indicadores:
- Un aumento del 15% en inversiones privadas en el último año.
- Desarrollo de proyectos de infraestructura por un valor de más de $500 millones de pesos.
Mientras unos disfrutan de obras públicas y privadas que mejoran su calidad de vida, otros luchan por acceder a educación, salud y empleo. Esto genera una marcada diferencia en la calidad de vida y expectativas futuras de los habitantes.
“No se puede hablar de verdadera prosperidad cuando hay segmentos enteros de la población que viven en la marginación,” señalaron expertos durante un reciente foro sobre desarrollo urbano.
Para abordar estas problemáticas, se hace necesario no solo continuar con los proyectos de desarrollo, sino también implementar políticas integrales que promuevan la inclusión social y equidad. Así, Saltillo podrá convertirse en una ciudad que brinde oportunidades equitativas para todos sus habitantes.