En 2023, México experimentó una notable disminución en el número de nacimientos, evidenciando una caída del 3.7% en comparación con el año anterior, según datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Esta tendencia refleja un cambio significativo en las decisiones reproductivas de las mexicanas.
Causas y Consecuencias
Analistas sugieren que varios factores pueden estar influyendo en esta disminución de nacimientos, incluyendo cambios sociales, económicos y culturales. Entre las principales causas se mencionan:
- Mayor acceso a métodos anticonceptivos
- Incremento en la educación y participación laboral de las mujeres
- Factores económicos que retrasan la decisión de tener hijos
La caída en la tasa de natalidad también puede tener repercusiones a largo plazo en la estructura demográfica del país, afectando planes y políticas relacionadas con educación, salud y pensiones.
Los datos del INEGI indican que en 2023 se registraron 3.7% menos nacimientos en comparación con 2022, lo cual se traduce en cientos de miles de nacimientos menos.
Expertos en demografía señalan que esta tendencia no es exclusiva de México, sino que es un fenómeno observado en varios países. El sociólogo Juan Pérez afirma:
“Estamos viendo un cambio global en las tasas de natalidad. Las parejas están decidiendo tener menos hijos por una variedad de razones, incluyendo las dificultades económicas y el deseo de una mejor calidad de vida”.
Ante esta situación, las autoridades deberán reevaluar y ajustar sus estrategias para abordar las futuras necesidades de la población y garantizar un desarrollo sostenible.