La compañía de videojuegos Epic Games ha presentado una demanda en contra de Google y Samsung, acusándolas de prácticas anticompetitivas relacionadas con la instalación de aplicaciones en dispositivos móviles. Esta medida es un nuevo capítulo en las batallas legales que Epic Games ha llevado a cabo en el pasado contra gigantes tecnológicos.
La controversia
De acuerdo con Epic Games, ambas compañías han implementado restricciones que limitan la capacidad de los usuarios para instalar aplicaciones de manera libre en sus dispositivos móviles, favoreciendo así sus propias plataformas de distribución. Esto, según Epic Games, impide la competencia justa y perjudica tanto a los desarrolladores como a los consumidores.
“Estas acciones no solo restringen la competencia, sino que también limitan la innovación y la libertad de elección de los usuarios”, señaló Epic Games en un comunicado.
La demanda resalta, entre otros puntos, la obligación de pasar por Google Play Store para poder descargar aplicaciones en dispositivos Android, así como las barreras que Samsung impone a través de su propia tienda de aplicaciones, Samsung Galaxy Store.
Epic Games también presentó datos estadísticos para respaldar sus afirmaciones:
- Google Play Store tiene más del 90% del mercado de aplicaciones en dispositivos Android.
- Samsung Galaxy Store controla cerca del 10% restante.
La demanda busca que se eliminen estas prácticas anticompetitivas y se establezcan medidas que permitan una competencia más abierta y equitativa. Esta no es la primera vez que Epic Games enfrenta a grandes corporaciones tecnológicas; en 2020, la compañía también emprendió una batalla legal contra Apple, alegando razones similares.
Epic Games espera que las autoridades reguladoras tomen cartas en el asunto y que los usuarios de dispositivos móviles puedan tener mayores libertades y opciones a la hora de instalar aplicaciones.