La Corte Suprema de Estados Unidos ha decidido mantener la prohibición a los abortos en Texas, reafirmando una de las leyes más restrictivas en el país respecto al derecho al aborto. Esta decisión llega tras intenciones previas de revisarla o anularla, lo que subraya el impacto continuo de la ley SB 8, vigente desde septiembre del 2021.

Detalles de la Decisión

La ley SB 8 prohíbe los abortos en Texas una vez que se detecta actividad cardíaca en el embrión, lo cual puede ocurrir aproximadamente a las seis semanas de gestación, un periodo en el que muchas personas no saben aún que están embarazadas. Lo que distingue a esta ley es que permite a particulares demandar a quienes faciliten o realicen abortos, ofreciendo compensaciones económicas de hasta 10,000 dólares por caso exitoso.

Expertos y grupos pro-derechos de las mujeres han manifestado su preocupación sobre las implicaciones de esta decisión. El Centro para los Derechos Reproductivos afirmó:

“Esta prohibición sigue siendo una amenaza significativa para la salud, seguridad y bienestar de las personas embarazadas en Texas.”

Estadísticas recientes muestran el impacto de esta legislación:

• Reducción del 60% en la cantidad de abortos realizados en Texas desde la implementación de la ley.
• Incremento en la cantidad de residentes que buscan servicios de aborto fuera del estado.

Mientras la presión por modificar o revocar la ley continúa, la decisión de la Corte Suprema representa un avance significativo de los movimientos provida en Estados Unidos, aunque sigue siendo un tema de gran controversia y debate político y social.