El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó que la inflación en México continuó su tendencia a la baja en septiembre, registrando una tasa anual de 4.58%. Este descenso en la inflación es parte de una mejora económica más amplia observada en los últimos meses.

Factores clave detrás de la disminución

La disminución en la inflación estuvo influenciada por varios factores, entre ellos la moderación de los precios de ciertos productos agropecuarios y energéticos. En particular, los precios de alimentos, bebidas y tabaco aumentaron en menor medida comparado con meses anteriores.

De acuerdo con el INEGI, los datos específicos dentro de la inflación anual fueron los siguientes:

• Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se incrementó 0.26% en el mes en comparación con el mes anterior.
• Inflación subyacente, que excluye precios más volátiles, aumentó un 0.29% en septiembre.
• Precios de bienes y servicios reportaron una subida del 5.76% anual.

En comparación, el año pasado en el mismo periodo, la inflación anual alcanzaba niveles superiores al 8%. La tendencia a la baja responde a políticas monetarias más estrictas y a la estabilización de algunos mercados internacionales.

Expertos sugieren que este ritmo de descenso en la inflación podría mantenerse si continúan las condiciones favorables. No obstante, advierten sobre la posibilidad de fluctuaciones debido a factores externos. Un economista señaló,

“Si bien hemos visto una mejoría, debemos estar atentos a las dinámicas globales que podrían impactar nuestra economía local.”

La reducción de la inflación puede aliviar las presiones económicas sobre los hogares mexicanos, pero las autoridades continúan monitoreando la situación de cerca para asegurar que se mantenga estable. El INEGI publicará más actualizaciones en los próximos meses para continuar evaluando el desarrollo económico del país.