Morena ha propuesto una reforma constitucional para limitar la capacidad del Poder Judicial en la revisión de reformas legales hechas por el Congreso. Esta iniciativa busca modificar el equilibrio de poder entre las diferentes ramas del gobierno en México, especialmente en cómo el Poder Judicial revisa y puede invalidar decisiones legislativas.
Detalles de la propuesta
La reforma implica cambios drásticos en la forma en que el Poder Judicial puede intervenir en las decisiones del Poder Legislativo. El objetivo es que las reformas aprobadas por el Congreso no sean sujetas a revisión ni puedan ser invalidadas por los jueces, restringiendo así las facultades de control judicial.
Este cambio ha iniciado un debate entre quienes apoyan la idea y quienes ven en ella una amenaza a la democracia y al equilibrio de poderes. Los defensores de la reforma argumentan que es necesario para asegurar que las decisiones democráticamente elegidas por el Congreso no sean obstaculizadas.
Los críticos, sin embargo, consideran que podría limitar severamente el poder del Poder Judicial de actuar como contrapeso frente a posibles abusos de autoridad. Expertos y opositores han expresado su preocupación, argumentando que ésta podría ser una maniobra para consolidar más poder en manos del gobierno actual.
En términos numéricos, la situación se refleja de la siguiente manera:
- Aproximadamente 2/3 de las reformas legislativas han sido revisadas judicialmente en los últimos años.
- El 30% de estas revisiones han resultado en modificaciones sustanciales a las leyes propuestas.
“No podemos permitir que el Poder Judicial siga actuando como un segundo Congreso, bloqueando reformas esenciales para el progreso del país”, señalaron fuentes cercanas a Morena.
La reforma aún debe ser debatida y votada en el Congreso, pero ha generado ya una división significativa en la opinión pública y entre los diferentes partidos políticos. Será crucial observar cómo se desarrollan las discusiones en las próximas semanas.