La diputada federal Patricia Armendáriz ha lanzado una grave acusación contra el padre Marcelo Pérez, párroco en el estado de Chiapas, señalándolo por supuestos vínculos con el crimen organizado en la región. Estas declaraciones han generado una ola de reacciones y controversias, especialmente entre los fieles de la comunidad y quienes conocen al sacerdote.

Controversia en Chiapas

El padre Marcelo Pérez es ampliamente conocido por su labor social y su activismo en favor de la paz y los derechos humanos en una zona que ha sido afectada por la violencia y el crimen organizado. Armendáriz, sin embargo, afirma tener pruebas de que Pérez está involucrado en actividades ilícitas, aunque hasta el momento no ha presentado evidencias concretas.

“Es necesario que las autoridades investiguen a fondo estos señalamientos y que se esclarezca la verdad para evitar injusticias”, manifestó la legisladora.

En respuesta a estas acusaciones, miembros de la comunidad se han pronunciado en defensa del padre Marcelo, subrayando su compromiso con la justicia y el bienestar de los chiapanecos. Muchos argumentan que estas imputaciones son un intento de desacreditar su trabajo, que ha desafiado intereses de grupos poderosos en la región.

En cuanto a las estadísticas de violencia en Chiapas, se presenta un panorama preocupante:

• El estado se encuentra entre las entidades con mayores índices de inseguridad en el país.
• Aumento significativo de delitos relacionados con el narcotráfico en los últimos años.
• Creciente presencia de grupos del crimen organizado operando en la región.

El debate sobre el papel del padre Pérez en la comunidad y los alcances de las acusaciones en su contra sigue abierto, mientras que las autoridades deberán continuar con las investigaciones pertinentes.