Hace 15 años, comenzó una tradición que aún perdura en una familia mexicana durante el Día de Muertos. En 2008, Roxana Hernández de León participó en un concurso de catrinas organizado por un conocido periódico, conquistando a jueces y espectadores con su diseño creativo y detallado.
Un legado que trasciende generaciones
Roxana recuerda con emoción el concurso que la catapultó a la fama local, un evento que no solo le valió elogios sino que también sembró en su familia una pasión por la tradición del Día de Muertos. Aunque solo ganó un modesto premio económico en aquella ocasión, el verdadero triunfo fue haber inspirado a toda una comunidad.
Desde entonces, cada 2 de noviembre, la familia de Hernández de León se reúne para celebrar y honrar a sus seres queridos que han partido. Lo hacen a través del arte de la caracterización, recreando catrinas que reflejan tanto el respeto por sus antepasados como la creatividad propia de esta festividad.
Entre los logros de Roxana en el mundo de las catrinas, destacan los siguientes puntos:
- 15 años participando en caracterizaciones del Día de Muertos.
- Inspiración para futuras generaciones en su comunidad.
- Pionera en la celebración de concursos de catrinas en la región.
Roxana comparte, llena de nostalgia:
“Este concurso cambió nuestra perspectiva sobre cómo honramos a nuestros difuntos y lo que significa para nosotros el Día de Muertos”.
Con cada año, esta tradición se renueva, fortaleciendo los lazos familiares y culturales, y asegurando que el legado del arte y memoria continúe vivo entre las nuevas generaciones.
