El panorama político en México vuelve a centrar su atención en el expresidente Ernesto Zedillo, ahora a la luz de las revelaciones hechas por Francisco Labastida en su nueva autobiografía. Labastida, quien fue candidato presidencial en el año 2000 por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), narra episodios significativos de su carrera política, así como sus relaciones y diferencias con Zedillo, quien gobernó el país de 1994 a 2000.
Acusaciones y Revelaciones
En su autobiografía, Labastida aborda la supuesta falta de apoyo de Zedillo durante su campaña presidencial. Según Labastida, el expresidente tenía una postura distante y no mostró el respaldo que el partido esperaba, lo cual, argumenta, pudo haber contribuido a su derrota frente a Vicente Fox, el candidato del Partido Acción Nacional (PAN) que terminó con 71 años de hegemonía priista.
A lo largo del libro, Labastida también reflexiona sobre otros aspectos de la administración de Zedillo, destacando algunas críticas a su manera de manejar ciertas situaciones nacionales e internacionales. Estas son algunas cifras y datos relacionados con el mandato de Zedillo que se destacan:
- Crecimiento económico promedio: 3% anual.
- Inflación controlada, alcanzando niveles bajos hacia el final del sexenio.
- Implementación del Fondo Bancario de Protección al Ahorro (FOBAPROA).
Labastida no se limita a señalar las presuntas deficiencias en el liderazgo de Zedillo, sino que también destaca logros y movimientos acertados en su gestión. Esta nueva obra ofrece un puente entre el pasado y las expectativas presentes del PRI, y añade una nueva dimensión a la discusión política en México.
“El desgaste del partido en el poder era evidente, y la falta de apoyo interno no hizo más que agravar la situación”, sostiene Labastida en uno de los fragmentos más reveladores del libro.
La autobiografía promete ser un documento crucial para entender la dinámica política de finales del siglo XX en México y las tensiones dentro del PRI durante uno de sus periodos más complicados.