El cierre del sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador se caracteriza por una economía débil, según el sector privado. La situación económica actual ha generado preocupación entre empresarios y analistas, quienes advierten sobre los desafíos que enfrentará el próximo gobierno.
Principales preocupaciones
Una de las principales inquietudes es el bajo crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB). De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la economía mexicana ha mostrado signos de desaceleración en los últimos años.
“El crecimiento económico ha sido insuficiente para generar los empleos necesarios y mejorar el bienestar de la población”, comentó un representante del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
- Crecimiento del PIB en 2022: 2.1%
- Crecimiento del PIB en 2021: 5.0% (recuperación post-pandemia)
Además, la inversión privada ha tenido un desempeño modesto. Según datos del Banco de México, la inversión fija bruta ha mostrado una tendencia de crecimiento lento, lo que afecta el desarrollo de nuevas empresas y la expansión de las existentes.
“Es fundamental crear un ambiente de certidumbre y confianza para atraer más inversiones”, señaló el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
El sector privado también señala que la inseguridad y los cambios en las políticas públicas han contribuido a la incertidumbre económica. Las empresas han tenido que adaptarse a nuevas regulaciones y enfrentar crecientes costos operativos.
De cara al futuro, la expectativa es que el próximo gobierno se enfoque en generar un ambiente propicio para el crecimiento económico sostenido y la mejora del bienestar social. La colaboración entre el sector público y privado será crucial para superar los desafíos actuales y construir una economía más robusta.
