La exjefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, negó categóricamente cualquier tipo de intervención en la elección del nuevo titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH). En una reciente declaración, expresó su respeto por los procesos internos y afirmó que la autonomía de las instituciones debe prevalecer.

Postura de Claudia Sheinbaum

Sheinbaum hizo hincapié en que no ha tenido ningún tipo de injerencia en esta decisión crucial para la defensa de los derechos humanos en el país. Subrayó la importancia de mantener las instituciones libres de influencias políticas externas para garantizar su correcto funcionamiento. En sus palabras, enfatizó:

“Creo firmemente en la independencia de las instituciones y siempre he actuado con ese principio en mente.”

El contexto de estas declaraciones surgió tras las acusaciones de que diversos actores políticos han buscado influir en la elección del titular de la CNDH para favorecer intereses particulares. Sin embargo, Sheinbaum desmintió tales afirmaciones y reafirmó su compromiso con la objetividad y la transparencia.

A continuación, se presentan algunos datos relevantes sobre la elección del titular de la CNDH:

• El proceso busca garantizar una evaluación objetiva y basada en méritos.
• La independencia de la CNDH es fundamental para su credibilidad y eficacia.
• Los nombramientos deben centrarse en la protección de los derechos humanos y no en agendas políticas.

En conclusión, Claudia Sheinbaum enfatizó que su único interés es que se siga un proceso justo y transparente, en línea con los principios democráticos y de respeto a los derechos humanos que rigen el país.