El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), continúa destacando uno de los logros más significativos de su administración: el control sobre la política energética del país. En varias ocasiones, AMLO ha señalado que la renacionalización del sector energético es una de las principales victorias de su gobierno.

Control del sector energético

Desde el inicio de su mandato en diciembre de 2018, AMLO ha hecho grandes esfuerzos por revertir las reformas energéticas implementadas por administraciones anteriores, argumentando que estas beneficiaban únicamente a empresas privadas y extranjeras a costa del pueblo mexicano. Con una serie de cambios legislativos y constitucionales, el presidente ha buscado fortalecer a Petróleos Mexicanos (Pemex) y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

“Es fundamental recuperar el control de nuestros recursos energéticos para el desarrollo soberano del país”, afirmó AMLO durante una de sus conferencias matutinas.

El presidente ha enfatizado con frecuencia los beneficios que, según él, traerán estos cambios, mencionando la reducción de costos para los consumidores y una mayor independencia energética. Para respaldar sus afirmaciones, se han presentado diversas estadísticas:

• Incremento en la producción de petróleo nacional.
• Reducción de las importaciones de combustible.
• Mayor inversión en infraestructura energética pública.

Estos logros son parte central del discurso de AMLO, quien no duda en presentarlos como evidencia del éxito de su administración en la defensa de los recursos nacionales. Sin embargo, sus políticas también han sido objeto de críticas tanto a nivel nacional como internacional, donde se argumenta que podrían disuadir la inversión extranjera y afectar la competitividad del país.

En resumen, AMLO sigue utilizando el control del sector energético como una carta clave en su gobierno, mientras aborda tanto los aplausos como las críticas que este tema genera.