Aranceles canadienses a autos eléctricos chinos: impacto y reacciones

Canadá impone aranceles del 10% al 25% a vehículos eléctricos chinos, buscando proteger su industria y fomentar la producción local.

En un movimiento reciente, el gobierno canadiense ha anunciado la implementación de aranceles sobre los vehículos eléctricos importados desde China. La medida se produce en medio de crecientes tensiones comerciales entre los dos países y un impulso por parte de Canadá para proteger su industria automotriz local.

Detalles de la medida

La ministra de comercio de Canadá, Mary Ng, afirmó que los aranceles, entre el 10% y el 25%, se aplicarán a todos los autos eléctricos fabricados en China. Esta decisión sigue al anuncio de que Canadá pretende reducir su dependencia de la fabricación china en varios sectores estratégicos.

“Estamos tomando esta acción para asegurar que nuestra industria automotriz tenga una competencia justa y que podamos seguir fortaleciendo la economía canadiense,” comentó Ng.

El gobierno canadiense también asegura que esta medida contribuirá a incentivar la producción local de vehículos eléctricos y a fomentar inversiones en tecnologías verdes.

Reacciones y análisis

El sector automotriz en China reaccionó rápidamente, calificando la medida de proteccionista. Según la Asociación China de Fabricantes de Automóviles, esto podría tener un impacto negativo en las ventas de vehículos eléctricos chinos en el mercado canadiense.

  • China exportó 150,000 vehículos eléctricos a Canadá en el último año.
  • El valor de estas exportaciones alcanzó los $4,000 millones de dólares.
  • El mercado canadiense representa el 10% de las exportaciones totales de vehículos eléctricos chinos.

Los expertos en comercio advierten que esta decisión podría llevar a represalias por parte de China y agravar las tensiones comerciales ya existentes. Sin embargo, otros analistas creen que esta es una oportunidad para que Canadá avance en su agenda de sostenibilidad y desarrollo tecnológico.

“A largo plazo, puede ser beneficioso para Canadá ya que estimulará la innovación doméstica y la creación de empleos en el sector automotriz,” mencionó James Smith, analista de economía.

Mientras tanto, los consumidores canadienses podrían enfrentar precios más altos en los vehículos eléctricos importados, lo cual podría tener efectos en la adopción masiva de estos autos en el país.