La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha emitido una alerta sobre el aumento significativo de casos de sarampión en varios países de América Latina. En un informe reciente, la OPS destacó que el incremento se debe en gran medida a la interrupción de los programas de vacunación durante la pandemia de COVID-19, lo cual ha dejado a muchas comunidades vulnerables ante esta enfermedad altamente contagiosa.

Incremento en los casos de sarampión

Durante el 2023, varios países han reportado un aumento considerable en el número de casos de sarampión. La OPS ha instado a los gobiernos de la región a fortalecer sus programas de vacunación y implementar medidas urgentes para evitar la propagación del virus. Según el informe, los países más afectados han sido Brasil, Venezuela y México.

El organismo de salud también indicó que la pandemia de COVID-19 provocó una disminución en las tasas de vacunación infantil, lo que ha contribuido significativamente al resurgimiento del sarampión. A través del informe, la OPS informó que algunas regiones han visto una disminución en la cobertura de vacunación de hasta el 10% en comparación con años anteriores.

• En Brasil, el incremento de casos fue del 25% en comparación con el año anterior.
• Venezuela reportó un aumento del 30% en los casos de sarampión.
• México observó un aumento del 15% en los casos registrados.

Un portavoz de la OPS declaró:

“Es fundamental que los países tomen medidas inmediatas para aumentar la cobertura de vacunación y prevenir futuros brotes que podrían tener consecuencias devastadoras para la salud pública”.

La OPS recomienda fortalecer los programas de vacunación a través de campañas de concienciación para aumentar la confianza pública en las vacunas. Además, es crucial que se priorice la vacunación en comunidades marginadas, donde las tasas de cobertura suelen ser más bajas.

Con las advertencias de la OPS sonando cada vez más fuertes, la comunidad internacional y los gobiernos locales deben tomar medidas decisivas para combatir el resurgimiento del sarampión y proteger a sus poblaciones más vulnerables. Revertir esta tendencia es un desafío urgente que requiere un enfoque conjunto y decidido.