En un esfuerzo por combatir los incendios forestales que han afectado varias regiones del país, el gobierno de Bolivia ha recibido un segundo avión de lucha contra incendios. Esta nueva incorporación a la flota es parte de una estrategia más amplia para controlar y mitigar los daños causados por el fuego, especialmente en áreas protegidas de gran biodiversidad.
Refuerzo aéreo y colaboración internacional
El más reciente avión llegado a Bolivia es un modelo de gran capacidad, equipado para enfrentar incendios de grandes proporciones. Este aeronave se une a otra que ya estaba operativa en el país, formando un equipo que busca mejorar la eficacia en la extinción de incendios. El gobierno boliviano ha enfatizado la importancia de contar con estos recursos para proteger los bosques y las comunidades cercanas.
Los incendios han afectado especialmente la región del Amazonas boliviano, donde las condiciones climáticas y la actividad humana han contribuido a la propagación del fuego. Las autoridades han descrito la situación como crítica y han señalado la necesidad de cooperación internacional para enfrentar los desafíos ambientales.
Algunos datos relevantes sobre los incendios en Bolivia incluyen:
- Más de 1,500 hectáreas afectadas en 2024.
- Cerca de 200 incendios reportados en lo que va del año.
- Incremento del 30% en la deforestación en comparación con el año anterior.
El Ministro de Medio Ambiente, al respecto de la llegada del nuevo avión, aseguró:
“Estamos comprometidos en la lucha contra los incendios y la protección de nuestra biodiversidad. La llegada de este segundo avión es crucial para nuestras operaciones.”
Además del apoyo aéreo, las medidas en tierra incluyen la capacitación de brigadas locales y la implementación de alertas tempranas para detectar y responder rápidamente a nuevos brotes de incendios.
Líderes comunitarios y ambientalistas han expresado su apoyo a las acciones del gobierno, aunque también han subrayado la necesidad de abordar las causas subyacentes de los incendios, como la deforestación ilegal y la agricultura no sostenible.