Las dudas y la controversia continúan rodeando el caso del asesinato del magistrade Jesús Ociel Baena Saucedo, quien fue encontrado muerto junto con su pareja el pasado 11 de octubre. El asesinato ha causado conmoción y una búsqueda urgente de justicia en todo el país.
Interrogantes sobre el peritaje
En medio de un clima de desconfianza creciente, los resultados del peritaje han levantado más preguntas que respuestas entre los familiares y cercanos a Baena Saucedo. Las autoridades locales han emitido poca información, lo que ha generado especulaciones sobre la calidad del proceso de investigación y la transparencia de las autoridades involucradas. Un familiar declaró:
“Estamos exigiendo claridad en la investigación. Queremos saber qué sucedió realmente esa noche.”
El asesinato del magistrade, quien era conocido por su trabajo en derechos humanos y su representación dentro de la comunidad LGBT+, ha puesto de manifiesto los desafíos que enfrentan las minorías en México en términos de seguridad y justicia.
Organizaciones de derechos humanos han exigido al gobierno que investigue a fondo este caso para evitar que se convierta en otro expediente sin resolver. Las cifras en el país reflejan un contexto alarmante:
- El 40% de los crímenes de odio en México quedan impunes.
- Cada año se registran más de 50 asesinatos de personas LGBT+ relacionados con prejuicios y discriminación.
El llamado es claro: se necesita una respuesta rápida que no solo identifique a los responsables, sino que también garantice que este tipo de crímenes no queden en la impunidad.