En un esfuerzo por combatir la delincuencia organizada, las fuerzas de seguridad en El Salvador han intensificado sus operaciones en diversas partes del país. En esta ocasión, la atención se centró en un vecindario al suroeste de la capital, San Salvador, donde soldados y policías llevaron a cabo un operativo masivo en busca de miembros de pandillas.

Operativo en la Zona de Nuevo Israel

El despliegue de cientos de soldados y policías tuvo lugar en la zona conocida como Nuevo Israel. Las autoridades acordonaron la área para efectuar registros y verificar la identidad de sus habitantes. El objetivo principal de esta operación fue capturar a individuos vinculados a actividades delictivas y pandillas, las cuales han estado afectando gravemente la seguridad del país.

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha defendido este tipo de acciones como parte de su estrategia para mejorar la seguridad nacional. Fuentes gubernamentales indican que los operativos continuarán en un esfuerzo por desmantelar las estructuras criminales.

Este tipo de estrategias se intensificaron tras el “estado de excepción” implementado desde marzo de 2022, una medida que ha permitido la detención de miles de personas sospechosas de pertenecer a pandillas sin necesidad de una orden judicial. Según datos oficiales, desde el inicio de este régimen se han logrado capturar a numerosos delincuentes, lo que ha contribuido a una reducción significativa de los índices de criminalidad en algunas áreas del país.

“Estamos devolviendo la paz a los salvadoreños”, afirmó un portavoz del gobierno, subrayando la importancia de estas acciones para el bienestar de la población.

• El gobierno reporta que se han realizado más de 72,000 arrestos desde el inicio del “estado de excepción”.
• La tasa de homicidios ha disminuido considerablemente, según las autoridades.

Sin embargo, las organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación por posibles abusos y violaciones a los derechos en el marco de estas operaciones. Denuncian que algunas detenciones podrían ser arbitrarias y piden mayor transparencia en el proceso.

Las autoridades salvadoreñas continúan firmes en su postura, afirmando que estos operativos son necesarios para devolver la tranquilidad a las calles del país y eliminar la amenaza que representan las pandillas. El debate sobre el equilibrio entre seguridad y derechos humanos sigue siendo un tema candente en el ámbito internacional.