El crimen organizado ha impactado de manera significativa en el abasto y costo de alimentos en diversas regiones de México, afectando particularmente a los estados de Tabasco y Tlaxcala. La violencia y extorsión por parte de grupos criminales han aumentado los costos de operación para los productores y distribuidores, quienes se ven obligados a incrementar los precios para el consumidor final.
Impacto en los precios
Los comerciantes en estas regiones han tenido que enfrentar una serie de obstáculos que incluyen el derecho de piso, amenazas e incluso el robo de mercancías. Esto ha provocado que muchos pequeños negocios cierren sus puertas o busquen alternativas para continuar operando.
- En Tlaxcala, los precios de los productos básicos han aumentado un 10% en los últimos meses.
- En Tabasco, el incremento es aún mayor, oscilando entre el 15% y el 20%, especialmente en productos perecederos.
David López, un comerciante de Tabasco, comentó sobre la situación actual:
“Estamos buscando soluciones, pero cada vez es más difícil sobrevivir en estas condiciones. Nuestros clientes cuestionan los aumentos, pero pocos saben lo que está detrás de estos precios.”
Las autoridades locales han intentado implementar medidas para proteger a los distribuidores y mitigar el impacto económico, pero la efectividad de estas acciones aún está por verse. Mientras tanto, la población continúa enfrentando un incremento en el costo de la canasta básica, escenario que agrava las condiciones económicas de muchas familias.