Recientemente, Human Rights Watch (HRW) ha levantado la voz respecto a la situación crítica que se vive en Gaza, donde miles de personas han sido desplazadas debido al conflicto en curso. La organización de derechos humanos ha instado a todas las partes involucradas a respetar las leyes de la guerra, enfatizando la necesidad de proteger a los civiles atrapados en medio de la violencia.
Desplazamiento masivo en Gaza
El conflicto en Gaza ha resultado en un desplazamiento masivo que afecta especialmente a los civiles. HRW ha subrayado que las condiciones en el área son cada vez más insostenibles, con cientos de miles de personas obligadas a abandonar sus hogares. Muchos están buscando refugio en escuelas, instalaciones de la ONU y otros lugares que puedan brindar un mínimo de seguridad.
La organización ha recordado a las partes en conflicto su obligación de adherirse a las leyes humanitarias internacionales, que prohíben los ataques indiscriminados y exigen la protección de los civiles. En un comunicado, Fred Abrahams, un alto ejecutivo de HRW, mencionó:
“Los líderes deben asegurar que están tomando todas las precauciones posibles para proteger a los civiles y las infraestructuras civiles, especialmente durante los ataques aéreos.”
Según las estadísticas presentadas por HRW, el número de personas desplazadas es alarmante y sigue aumentando. Algunos de los puntos destacados incluyen:
- Miles de personas han huido de sus hogares en la última semana.
- Cientos de escuelas han sido convertidas en refugios temporales.
- Se estima que hay más de 200,000 desplazados internos en Gaza.
HRW ha pedido a las agencias internacionales que intensifiquen sus esfuerzos para proporcionar ayuda humanitaria a las personas afectadas, ya que la situación logística y de recursos es extremadamente desafiante. La escasez de alimentos, agua potable y medicinas es una preocupación creciente.
Además, HRW ha destacado la necesidad de un cese inmediato de hostilidades para facilitar el acceso humanitario a las áreas más afectadas. El llamado es claro: proteger a los civiles y permitir que las organizaciones humanitarias cumplan con su misión esencial en medio de esta crisis.