El debate sobre la prisión preventiva oficiosa en México sigue tomando relevancia, ya que el Senado de la República discute una propuesta para ampliar los supuestos bajo los cuales se aplica esta medida. Actualmente, la prisión preventiva oficiosa es una herramienta legal que permite mantener a una persona en detención mientras se lleva a cabo su juicio, sin necesidad de que un juez lo ordene específicamente, y solo se aplica a ciertos delitos graves.
Propuesta de Ampliación
El proyecto de ley busca añadir delitos como el feminicidio y la corrupción a la lista de situaciones que ameritan prisión preventiva oficiosa de manera automática. Los promotores argumentan que esto ayudaría a combatir la impunidad y proteger a las víctimas.
En México, la prisión preventiva oficiosa ha sido un tema controvertido. Grupos de derechos humanos y algunos académicos señalan que su uso excesivo podría violar los derechos humanos y sobrecargar el sistema penitenciario.
“La ampliación de la prisión preventiva oficiosa podría derivar en un abuso de esta figura y violaciones a los derechos fundamentales,” afirmó un experto en derecho penal.
Algunos datos relevantes sobre la prisión preventiva en México son:
- Actualmente se aplica a delitos como el homicidio, terrorismo y el uso de armas exclusivas del ejército.
- Un gran porcentaje de los presos en México están bajo prisión preventiva, sin que se haya dictado sentencia.
- La cárcel preventiva puede superar los dos años en muchos casos, lo que incrementa la sobrepoblación en las prisiones.
Los senadores deberán considerar el balance entre justicia y derechos humanos al decidir sobre la propuesta, dado el impacto que podría tener en el sistema judicial del país.