El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, ha hecho una declaración contundente en contra de las periodistas Azucena Uresti y Anabel Hernández. Rocha Moya afirmó que responsabiliza a estas comunicadoras por cualquier atentado que pueda sufrir él o su familia, argumentando que ellas publicaron información que podría ponerlos en riesgo. Estas afirmaciones han generado un amplio debate sobre la libertad de prensa y la seguridad de los periodistas en México.
Contexto de la Declaración
El conflicto surgió a raíz de unas publicaciones donde se relaciona al gobernador con actividades ilícitas. Rocha Moya sostiene que estas declaraciones son infundadas y que los reportajes han distorsionado la realidad, comprometiendo su seguridad personal y la de sus seres queridos. En una rueda de prensa, Rocha Moya mencionó su preocupación por cómo la información ha sido manejada.
“Cualquier cosa que me pase a mí o a mi familia, ellas serán las responsables”, expresó el gobernador en referencia a las periodistas involucradas.
El tema ha provocado diferentes reacciones en el ámbito político y social, donde se debate el equilibrio entre el derecho a informar y las responsabilidades que conlleva esta libertad. Las organizaciones de derechos humanos y periodistas han manifestado su preocupación por las declaraciones de Rocha Moya, enfatizando la importancia de proteger a la prensa.
Algunos datos relevantes que surgen del contexto son:
- Sinaloa es uno de los estados con mayores índices de violencia en México.
- La Federación Internacional de Periodistas reporta que México es uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo.
- Desde 2000, más de 150 periodistas han sido asesinados en el país.
La declaración de Rocha Moya vuelve a poner en foco los riesgos que enfrentan los comunicadores al investigar y publicar temas delicados, en un entorno donde la violencia y la censura son desafíos constantes para la libertad de expresión.