En Saltillo, Coahuila, un grupo creciente de ciudadanos ha levantado fuertes denuncias sobre el presunto despojo ilegal de vehículos. La problemática, que viene extendiéndose en los últimos meses, ha generado preocupación entre los habitantes de la localidad, quienes temen por la seguridad de sus bienes.
La preocupación ciudadana crece
Los afectados narran experiencias similares: hombres no identificados, algunos incluso con lo que parecen ser uniformes oficiales, detienen a los conductores para revisar documentos y terminan confiscando los autos bajo pretextos dudosos. La situación ha alertado a muchos, y una creciente comunidad en redes sociales ha surgido para compartir testimonios y alertar a otros.
Varios ciudadanos han expresado su frustración y miedo a través de estos espacios, buscando llamar la atención de las autoridades y exigirles soluciones ante la creciente ola de despojos. Las experiencias narradas incluyen situaciones en las que los conductores ni siquiera estaban infringiendo normativas viales.
“No podemos vivir con miedo de que nos quiten lo que con tanto esfuerzo hemos conseguido. Esto tiene que parar”, comentó uno de los afectados.
Las estadísticas recopiladas por los propios ciudadanos reflejan el impacto de esta problemática:
- Más de 50 casos reportados solo en el último mes.
- Incremento del 30% en denuncias respecto al año anterior.
La comunidad, cansada de la falta de acción, está ejerciendo presión sobre las autoridades locales para que realicen una investigación exhaustiva y tomen medidas efectivas que paren estos abusos. Mientras tanto, recomiendan a los conductores estar atentos y documentar cualquier incidente que pueda ocurrir como medio de protección. La situación sigue siendo delicada y el caso está aún en desarrollo.