El robo de combustible sigue siendo un problema grave en México, a pesar de los esfuerzos gubernamentales para frenarlo. Las cifras más recientes reveladas indican que los incidentes de “huachicoleo” no han disminuido significativamente, aunque las denuncias formales han bajado.
El huachicoleo en números
De acuerdo con datos oficiales proporcionados por Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Secretaría de Seguridad Pública, las cifras del huachicoleo en el primer semestre de 2023 son alarmantes:
- Se han registrado más de 4,000 tomas clandestinas.
- Las pérdidas económicas ascienden a millones de pesos diarios.
- Las denuncias formales han disminuido en un 20% comparado con el mismo período del año pasado.
El Director General de Pemex, Octavio Romero Oropeza, destacó en una reciente conferencia de prensa:
“No podemos bajar la guardia. El combate al robo de combustible es una prioridad de esta administración.”
A pesar de los esfuerzos, las tomas clandestinas continúan siendo una plaga que afecta no solo a Pemex, sino también a toda la población mexicana. Estas actividades ilícitas no solo merman los recursos de la nación, sino que también representan un riesgo significativo para la seguridad.
Las autoridades han intensificado las operaciones para detectar y desmantelar las redes de huachicoleros. Sin embargo, la disminución en el número de denuncias es un signo preocupante, pues podría indicar una mayor sofisticación en las operaciones clandestinas o incluso un aumento en la impunidad.
Los ciudadanos pueden colaborar reportando actividades sospechosas y evitando la compra de combustibles de origen desconocido. La denuncia anónima continúa siendo una herramienta crucial en la lucha contra este delito.