El huracán John, categorizado como categoría 3, azotó las costas de Guerrero y Oaxaca, dejando a su paso una estela de daños y preocupaciones para los habitantes de la región. Este fenómeno meteorológico, que se fortaleció rápidamente en el Pacífico, trajo consigo vientos extremadamente fuertes y lluvias torrenciales.
Impacto del huracán en la región
Las afectaciones en las infraestructuras locales han sido significativas, con numerosos reportes de viviendas dañadas y cortes de electricidad. Las autoridades han respondido movilizando equipos de emergencia para atender a la población afectada. Se han desplegado albergues temporales para quienes han tenido que evacuar sus hogares.
“Estamos trabajando a toda capacidad para asegurar la seguridad de nuestra gente y minimizar los daños”, declaró un portavoz de Protección Civil.
Hasta el momento, se han registrado las siguientes estadísticas preliminares:
- 200 viviendas afectadas
- 50,000 personas sin electricidad
- Se han reportado 5 heridos
- Se han activado 20 albergues temporales
El gobernador de Guerrero ha solicitado apoyo adicional del gobierno federal para enfrentar esta emergencia y acelerar los trabajos de recuperación. Los operativos de rescate continúan y las autoridades instan a la población a mantenerse informada y seguir las recomendaciones emitidas por Protección Civil.
Las clases en las regiones afectadas han sido suspendidas hasta nuevo aviso, mientras se evalúan los daños y se garantiza la seguridad de los estudiantes. Asimismo, se han cerrado temporalmente algunas carreteras debido a los deslizamientos de tierra causados por las intensas lluvias.
Es crucial que la población se mantenga alerta y tome las precauciones necesarias ante la posibilidad de que el huracán John pueda seguir causando estragos en otras áreas del país. La solidaridad y cooperación comunitaria serán fundamentales en estos momentos difíciles.