Un reciente decreto en Argentina ha generado un gran debate al permitir que los jóvenes de 18 años puedan portar armas de manera legal. Esta medida, que modifica las regulaciones anteriores, ha suscitado tanto apoyo como críticas entre la población y expertos en seguridad.
Cambios en la legislación
La nueva normativa, firmada por el presidente, ajusta la edad mínima para portar armas de 21 a 18 años. Según las autoridades, este cambio busca alinear las regulaciones argentinas con las de otros países y responder a demandas sociales sobre derechos individuales.
- Edad mínima para portar armas: de 21 a 18 años.
- Revisión de las regulaciones actuales.
Los defensores del decreto argumentan que es un reconocimiento de la madurez y responsabilidad de los jóvenes adultos, quienes ya pueden votar y asumir otras responsabilidades cívicas a los 18 años. Un partidario expresó:
“Es un paso hacia la equiparación de derechos para los jóvenes. Si pueden votar, también deberían poder decidir sobre la posesión de un arma.”
No obstante, opositores advierten sobre los riesgos potenciales de esta decisión. Expertos en seguridad sugieren que podría haber un aumento en los incidentes violentos si no se implementan controles adecuados.
El gobierno ha asegurado que se mantendrán estrictos controles y capacitaciones para quienes deseen obtener armas, buscando así minimizar cualquier impacto negativo. Será crucial observar cómo evoluciona esta situación en los próximos meses y evaluar sus efectos en la sociedad.