La justicia argentina ha ratificado la condena por corrupción en contra de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, implicada en un caso conocido como “Vialidad”. Esta decisión marca un momento crítico en la política argentina, considerando la importante figura que representa Fernández de Kirchner en el ámbito nacional e internacional.

Acusaciones y condena

Cristina Fernández fue sentenciada a seis años de prisión en un juicio que analizó presunto desvío de fondos públicos durante su administración. La acusación sostiene que la ex mandataria, junto con otros funcionarios, favoreció de manera ilícita a empresas vinculadas con el empresario Lázaro Báez, para la adjudicación de obras viales en la provincia de Santa Cruz.

El fallo fue confirmado por una de las cámaras de apelaciones de Argentina, lo que deja firme la sentencia aunque todavía existen instancias judiciales a las que la ex presidenta podría recurrir. Durante el proceso, Fernández de Kirchner ha señalado que es víctima de una persecución política. En sus propias palabras, declaró:

“Este fallo no es contra mí, es contra un proyecto político.”

Las cifras del caso detallan los movimientos irregulares de fondos:

• Aproximadamente 51 contratos en juego.
• Desvío total estimado en varios millones de dólares.

A pesar de la condena, el proceso judicial aún no es definitivo. Cristina Fernández mantiene inmunidad parlamentaria al ser vicepresidenta y líder del Senado, lo que por ahora le protege de cumplir la sentencia de manera inmediata.