La reciente aprobación de la reforma legal que despenaliza el aborto en la Ciudad de México sin importar la etapa del embarazo ha generado reacciones encontradas en distintos sectores de la sociedad, incluida la Iglesia Católica. La reforma establece que ahora las mujeres podrán acceder a servicios de aborto sin enfrentar penas legales en cualquier fase de gestación, lo que ha sido recibido con críticas por parte de la jerarquía eclesiástica.
Reacción de la Iglesia Católica
La Iglesia Católica en México ha expresado su desacuerdo con la reforma, argumentando que pasa por alto la defensa de la vida desde la concepción. En un comunicado, la Conferencia del Episcopado Mexicano señaló que esta legislación va “en contra de la dignidad humana y los valores fundamentales”.
“La vida debe ser protegida desde el momento de la concepción”, afirmaron los representantes eclesiásticos.
Además, hicieron un llamado a los fieles y a los ciudadanos en general para que reflexionen sobre las implicaciones de esta medida y para que se promueva una cultura de defensa de la vida. La Iglesia subrayó la importancia de ofrecer apoyo a las mujeres en situaciones difíciles, proponiendo alternativas que no involucren el aborto.
La reforma ha sido apoyada por grupos feministas y de derechos humanos, quienes argumentan que es un paso importante hacia la autonomía de las mujeres y el reconocimiento de sus derechos reproductivos. No obstante, los desafíos y el debate en torno al tema continúan en la sociedad mexicana.
- La reforma legal aplica a cualquier etapa del embarazo.
- El aborto ya no enfrentará sanciones legales en la CDMX.
- La Iglesia urge a reflexionar sobre la legislación.