En los hospitales de México, circulan numerosas leyendas que han capturado la imaginación y el temor de pacientes y personal de salud por años. Una de las más conocidas es la historia de “La Planchada”, la supuesta enfermera fantasma que, según se dice, aparece en la noche para atender a los enfermos.
Origen de la leyenda
La historia de La Planchada se remonta a principios del siglo XX. Se cuenta que era una joven enfermera llamada Eulalia, quien trabajaba en un hospital de la Ciudad de México. Eulalia era conocida por su profesionalismo y por llevar siempre su uniforme perfectamente planchado, lo que le valió el apodo de “La Planchada”.
Según la leyenda, Eulalia se enamoró de un médico, pero él no correspondió a sus sentimientos y la dejó por otra mujer. Devastada por el desamor, Eulalia cayó en una profunda tristeza que afectó su trabajo, y se dice que eventualmente falleció en circunstancias trágicas.
Desde entonces, se afirma que su espíritu vaga por los hospitales, realizando su trabajo con esmero. Se dice que su presencia ha sido reportada principalmente en hospitales de Ciudad de México, Veracruz y Monterrey.
En estos lugares, La Planchada aparece ante enfermos, a quienes atiende en silencio. La narración popular estipula que aquellos que han sido asistidos por esta figura misteriosa experimentan una notable mejoría.
El fenómeno de La Planchada es un claro ejemplo de cómo las historias orales afectan nuestras creencias y percepciones, especialmente en ambientes cargados de angustia y pérdida. Como todas las leyendas, su atractivo radica en el misterio que la rodea y en la forma en que se mantiene viva a través de quienes la cuentan y la creen.