En los últimos años, México ha sido un destino atractivo para las empresas que buscan adoptar la estrategia de nearshoring, es decir, establecer operaciones cerca de su mercado principal para reducir costos y mejorar la eficiencia logística. Sin embargo, un reporte reciente ha señalado que el 30% de las empresas que tenían planes de instalarse en el país podrían descartarlos debido a la falta de infraestructura básica.
Impacto del nearshoring en México
Según el reporte, la infraestructura deficiente en áreas clave, como el suministro de energía eléctrica, agua y transporte, ha sido un obstáculo significativo para las empresas extranjeras. Estas compañías necesitan garantías de que podrán operar sin interrupciones, algo que en muchas regiones de México no se puede asegurar.
El impacto negativo de esta situación se refleja en las cifras obtenidas por el estudio:
- 30% de empresas descartarían instalarse en México.
- Una disminución en la inversión extranjera directa (IED) proyectada.
- Reducción en la generación de empleos por falta de nuevas instalaciones.
Además, los expertos advierten que, de no tomarse medidas inmediatas para mejorar la infraestructura, esta tendencia podría empeorar. Un empresario del sector comentó:
“Las oportunidades de crecimiento económico y desarrollo que ofrece el nearshoring son inmensas, pero sin una infraestructura adecuada perdemos competitividad frente a otros países.”
Ante este desafío, se han planteado posibles soluciones como la inversión en infraestructura energética, la construcción de carreteras y la modernización de los puertos. Sin embargo, estas medidas requieren tanto del apoyo gubernamental como de la colaboración del sector privado.
En resumen, mientras que el nearshoring presenta una oportunidad significativa para el desarrollo económico de México, la falta de infraestructura básica sigue siendo un obstáculo que debe ser superado para aprovechar al máximo esta tendencia global.