El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, arremetió contra la Asamblea General de la ONU, calificándola de “pantano de bilis antisemita”. Sus declaraciones ocurrieron después de que el organismo internacional aprobara una serie de resoluciones que critican las políticas israelíes en Palestina.

Un entorno hostil para Israel

Netanyahu expresó su descontento durante una conferencia de prensa, donde señaló que las resoluciones de la ONU están “desconectadas de la realidad” y son “manipuladas” por aquellos que buscan demonizar al Estado de Israel. Argumentó que las decisiones del organismo internacional dañan los esfuerzos por lograr una paz genuina en la región.

“La ONU es un lugar donde predomina la hipocresía y la distorsión de la verdad sobre Israel. No cederemos ante quienes intentan mancillar nuestra reputación y socavar nuestra soberanía”, manifestó Netanyahu.

La Asamblea General de la ONU suele aprobar resoluciones que critican las acciones de Israel en los territorios palestinos, lo que ha generado tensiones entre Israel y el organismo global. En esta última sesión se aprobaron varias resoluciones que abordaban la situación en Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este.

• 15 resoluciones criticaron a Israel.
• 12 se centraron en los asentamientos israelíes.
• 8 resoluciones abordaron el bloqueo en Gaza.

El embajador de Israel en la ONU, Gilad Erdan, también criticó las resoluciones y acusó al organismo de tener un sesgo anti-Israel. Señaló que estas decisiones no reflejan la complejidad del conflicto y solo sirven para alimentar el odio y la división.

Finalmente, Netanyahu destacó que, a pesar de las críticas internacionales, Israel continuará defendiendo su derecho a existir y proteger a sus ciudadanos de cualquier amenaza externa.