Un menor de edad en Saltillo, Coahuila, se encuentra en condición grave tras haber ingerido varias baterías, que al parecer eran de aparatos electrónicos pequeños. El incidente ha puesto en alerta a las autoridades de salud y ha abierto un debate sobre los peligros que representan estos pequeños artefactos en el hogar.

Detalles del incidente

El menor, cuyo nombre no ha sido revelado por razones de privacidad, fue trasladado de urgencia al hospital donde los médicos trabajan para estabilizarlo. Las baterías ingeridas pueden provocar severos daños internos debido a sus sustancias químicas, que son altamente corrosivas una vez que entran en contacto con el organismo.

Las autoridades han aprovechado este caso para recordar a los padres la importancia de mantener tales objetos fuera del alcance de los niños. Estas baterías, comunes en controles remotos y juguetes electrónicos, pueden parecer inofensivas, pero representan un riesgo significativo cuando son ingeridas.

“Es fundamental que los padres revisen los objetos que tienen en casa y los mantengan alejados de los menores para evitar tragedias”, comentó un portavoz del hospital.

• Hay más de mil casos anuales de niños que ingieren baterías en México, según estadísticas de salud.
• El 20% de estos casos requieren intervención médica urgente.
• En el 5% de los casos, las consecuencias pueden ser mortales.

En la actualidad, el menor sigue en observación intensiva, mientras que los expertos médicos reiteran la necesidad de supervisión constante y precauciones adicionales en los hogares para prevenir situaciones similares en el futuro.