La reanudación de las misas en la icónica Catedral de Notre Dame, prevista para finales del año siguiente, es un acontecimiento que ha capturado la atención de todo el mundo. Desde el devastador incendio en abril de 2019, cientos de personas han trabajado incansablemente para restaurar este patrimonio histórico y religioso. Entre ellos se encuentran restauradores, ingenieros y artesanos que han compartido algunas de sus experiencias y retos más significativos.
Testimonios de quienes hicieron posible la reconstrucción
Una restauradora, encargada de recuperar los vitrales históricos, destacó la enorme responsabilidad que sienten al trabajar en una estructura tan significativa.
“Es un desafío monumental no solo restaurar lo que se perdió, sino preservar su historia para futuras generaciones”, afirmó.
Además, los retos técnicos no han sido pocos para los ingenieros. El desafío de reconstruir la aguja y la bóveda, respetando los métodos tradicionales y materiales originales, requiere precisión extrema.
El proyecto también supone un importante esfuerzo logístico por parte del equipo de gestión. La coordinación de recursos y la planificación avanzada han sido cruciales para el éxito continuo de la restauración.
Algunos datos sobre el proceso de restauración incluyen:
- Miles de horas de trabajo dedicadas por los artesanos y técnicos
- Presupuesto de cientos de millones de euros destinado a la reconstrucción
- Colaboración internacional de expertos en conservación
La reapertura de la catedral no solo es un testimonio de resiliencia y colaboración, sino también un símbolo de esperanza para París y el mundo entero. Con cada paso, se renueva la promesa de salvaguardar este tesoro cultural para las futuras generaciones.