En medio de una acalorada contienda política en Estados Unidos, el expresidente Donald Trump ha vuelto a desatar una controversia con sus comentarios antiinmigrantes. Durante un reciente mitin, Trump lanzó acusaciones que, según los críticos, buscan dividir y sembrar miedo entre la población.
La estrategia de Trump
Trump ha sido conocido por su retórica incendiaria y su postura firme contra la inmigración. En su discurso más reciente, no solo reiteró su compromiso con la construcción del muro fronterizo, sino que también apuntó directamente a las comunidades inmigrantes.
Los analistas políticos indican que esta estrategia tiene como objetivo movilizar a su base electoral, apelando a sentimientos de inseguridad y xenofobia. De acuerdo con datos recientes:
- El 65% de los votantes republicanos apoyan políticas migratorias más estrictas.
- El muro fronterizo sigue siendo uno de los principales temas para el 50% de los votantes de Trump.
- Un 45% de los estadounidenses cree que la inmigración es un problema serio.
En su alocución, el expresidente afirmó que los inmigrantes “están trayendo crimen y drogas a nuestras comunidades”. Estas acusaciones han sido fuertemente criticadas por activistas y organizaciones proinmigrantes.
“Los comentarios de Trump son destinados a dividirnos y crear odio”, declaró María González, portavoz de una organización de derechos humanos.
Las reacciones a las palabras de Trump no se han hecho esperar. Mientras sus seguidores aplauden su firmeza en temas de seguridad, otros apuntan a que sus declaraciones no hacen más que polarizar una sociedad ya de por sí dividida.